martes, enero 17, 2012

IC 2118, la Nebulosa Cabeza de Bruja


Dobla, dobla el trabajo y la pena; arda el fuego y hierva la caldera: Macbeth quizá consultó a la Nebulosa Cabeza de Bruja (clic en la imagen para ampliarla a 900 x 619 píxeles o verla aún más grande).

Esta nebulosa de reflexión, cuya forma tan peculiar se observa en la imagen mostrada arriba (ver también la siguiente imagen), se asocia a la brillante estrella Rigel, perteneciente a la constelación de Orión, que se encuentra más allá del borde inferior de la imagen.

Conocida de forma menos descriptiva como IC 2118, la Nebulosa Cabeza de Bruja brilla sobre todo gracias a que la luz de Rigel se refleja en el fino polvo que constituye la nebulosa.

El panorama completo. En esta otra toma, la sugestiva forma de la Cabeza de Bruja es fácilmente perceptible. Rigel es la brillante estrella azulada rodeada de polvo que se encuentra cerca del centro de la imagen (clic en la imagen para ampliarla, o verla mucho más grande).

El color azul de la Nebulosa Cabeza de Bruja y del polvo que rodea Rigel, notorio en la imagen que precede a este párrafo, se debe no sólo a que ese es el color de Rigel, sino también al hecho de que los granos de polvo reflejan la parte azul del espectro luminoso de Rigel más efectivamente que la roja.

El mismo proceso físico es la causa de que durante el día el cielo terrestre parezca azul, aunque las moléculas de nitrógeno y oxígeno sean las que en la atmósfera terrestre dispersan la luz.

Tanto Rigel, la Nebulosa Cabeza de Bruja como el gas y el polvo que las rodean, se encuentran a unos 800 años-luz de nosotros.


Un punto sobre otro punto. La Tierra, el Sol, Rigel y VY Canis Majoris en escala.

Vía Foto astronómica del día correspondiente al 17 de enero de 2012. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito de la imagen y copyright: Gimmi Ratto y Davide Bardini (Collecting Photons).

Nota: Síganme en Twitter (@astrosofista) para saber más sobre el universo y mi mundo. Desde que comencé a tuitear en el equinoccio de marzo pasado, 4400 tuits ilustran y amplían las más de 250 entradas publicadas en el blog desde entonces. ¿Qué esperan para unirse a esta gran conversación?